Los recubrimientos resistentes al desgaste desempeñan un papel crucial en la aplicación en discos de freno de automóviles. Forman una capa protectora de alta dureza y resistencia al calor sobre la superficie de los discos, reduciendo eficazmente el desgaste y la abrasión durante el frenado y disminuyendo las pérdidas causadas por la fricción frecuente, prolongando así su vida útil. Además, estos recubrimientos tienen un buen rendimiento de disipación térmica, lo que permite disipar rápidamente la gran cantidad de calor generado durante el frenado, evitar la degradación del rendimiento de los discos de freno por sobrecalentamiento, garantizar el funcionamiento estable del sistema de frenado y mejorar la seguridad y la fiabilidad del frenado, permitiendo a los conductores conducir con confianza en diversas condiciones de la carretera. Constituyen un material fundamental para la optimización de los sistemas de frenado de automóviles modernos.